La prevención es fundamental para que los menores no entren en dinámicas de comportamiento y de relación peligrosas. El alumnado conocerá en este módulo cómo trabajar con la resiliencia, la regulación emocional, las habilidades sociales, la empatía y las emociones positivas.
En estos dos temas que van ligados conformando uno solo, el alumnado se adentrará en el campo de la conducta prosocial como ámbito de prevención que aúna aspectos relacionados con la resiliencia, regulación emocional, habilidades sociales, empatía y emociones positivas. El enfoque, dentro del ámbito de la llamada “Psicología positiva”, plantea desde el 2000 la necesidad de potenciar los procesos positivos para que éstos inhiban los negativos, que constituyen factores de riesgo para un buen desarrollo del adolescente. Se trata de analizar los aspectos psicosociales que atenúan la violencia y la agresividad en la adolescencia mediante el fortalecimiento de factores de protección en dicha etapa evolutiva, especialmente en entornos sociales desfavorecidos o en riesgo psicosocial.
El objetivo fundamental pues, es proporcionar al estudiante un conocimiento básico sobre la conducta prosocial y las variables implicadas en esta conducta considerada contrapuesta a la conducta agresiva, atendiendo a los factores de riesgo y de protección personales. Para ello, se incidirá en el conocimiento básico de los procesos afectivos implicados, fundamentalmente la empatía; de los procesos cognitivos, en concreto el razonamiento moral prosocial; y de los procesos de socialización o contextuales (cultural, escolar y familiar).
El alumnado, al finalizar el tema, será capaz de:
Se pretende con este módulo reconocer el papel de la familia como contexto esencial en el desarrollo humano, siendo algunos de los objetivos propuestos a lo largo del módulo:
Se pretende que los estudiantes adquieran conocimientos acerca de conceptos básicos: factores de riesgo, factores de protección, vulnerabilidad, resiliencia, apego, pautas de crianza; ya que resulta esencial delimitar cuales son los elementos de riesgo y amortiguadores a los que se ven expuestas con mayor frecuencia las familias.
El conocimiento de dichos conceptos básicos permitirá a los estudiantes ser competentes para detectar y analizar los factores de riego y protectores presentes en las dinámicas familiares, con los que diseñar planes de intervención y prevención dirigidos a promover el bienestar del menor y de la familia.
El alumnado va a poder formarse en los siguientes contenidos:
Los objetivos de la presente unidad temática se centran básicamente en:
Una vez superados los contenidos y objetivos de este tema, el alumnado será competente para afrontar con mayor precisión las problemáticas que rodean a aquellos adolescentes que tienen dificultades en adaptarse a la educación formal. Conocerá los mecanismos institucionales para atender las necesidades de apoyo e inclusión educativa y podrá evaluar los riesgos y planificar intervenciones desde la educación formal e inclusiva.
A lo largo de este tema analizaremos los entornos comunitarios de marginación; la comunidad, se compone de cuatro elementos estructurales sobre los que se desarrolla la intervención social: territorio, población, las demandas expresadas por la ciudadanía y aquellos recursos de que se dispone para favorecer el desarrollo. En el espacio de tránsito vital, han de situarse objetivos orientados a la integración, por tanto es necesario trabajar desde propuestas participativas en la comunidad, con la comunidad y para la comunidad.
Este tema persigue los siguientes objetivos:
El alumnado que supere este módulo será capaz de establecer diagnósticos en clave local y proyectar planes estratégicos que promocionen e integren adolescentes en riesgo, tomando como referencia la dimensión comunitaria, los elementos que la configuran y la participación desde un enfoque de desarrollo local.
Los contenidos que se van a desarrollar en este tema plantean una visión crítica sobre el uso de pantallas más allá de sus oportunidades y riesgos.
Desde este plano trabajaremos los siguientes objetivos:
Una vez el alumnado supere los contenidos y los objetivos, será competente para afrontar problemáticas relacionadas con el uso de las pantallas, redes virtuales. Además permitirá al alumnado posicionarse en bases críticas para afrontar la realidad virtual de los adolescentes en clave preventiva.